Encuentro con periodistas
Fernando Piana
Lunes 7 de noviembre – Escuela de Educación media Nº 1 DE 13 (Villa Lugano)
El 7 de noviembre nuevamente concretamos un encuentro con profesionales de los medios. Esta vez nos encontramos con Fernando Piana, periodista de Radio Nacional y docente de la Universidad de Buenos Aires. Compartimos con ustedes nuestro diálogo.
“La radio es una buena herramienta para generar más identidad”
Lo que tienen estos tiempos, es que con estas herramientas que les dan en el colegio ustedes ya pueden trabajar en periodismo. Y la tecnología también ayuda. Con los blogs, por ejemplo, ustedes pueden escribir, contar lo que les pasa. Y me parece que el periodismo, la tele, la radio, todo lo que hagamos son una buena herramienta para generar más identidad, mirarnos a la cara, saber quiénes somos.
Periodista es el tipo que pregunta, el que tiene inquietudes, el que investiga a su manera, el tipo que quiere cambiar la realidad
Me parece que últimamente hay una sana recomposición de lo que es el barrio, de mostrar lo que es el barrio. Les digo esto para que lo lleven siempre encima. A mí me tocó hacer una carrera universitaria, una profesión donde no hay mucha gente de nuestros barrios. Y eso, a veces, es una mochila difícil de llevar, porque uno ve que hay ciertos juicios o ciertas opiniones que se tienen sobre nosotros mismos que están bastante herradas. Así como algunos estudios que se hacen de la zona, por ejemplo lo del Indoamericano, lo de Soldati, o lo que pasó con la gente de Villa Cartón cuando estuvo refugiada en Parque Roca porque se incendió la villa, que un chiquitito se murió porque el Gobierno de la Ciudad no tenía una ambulancia y se ahogó en el lago. Y esos peligros corríamos todo el tiempo nosotros cuando éramos pibes.
Las pequeñas experiencias son las que te van formando como persona, y es lo que uno lleva después a su profesión, a los medios, sin comprar personalidades extrañas, siendo ustedes. Por eso me parece que lo que lleva a ser un buen profesional es ser sinceros con nuestro origen, con nuestra vida y con nosotros mismos, especialmente la radio, que es lo que yo hago desde hace 15 años y esperemos que por siempre.
Cuando damos clase en la universidad sobre cómo hacer radio les decimos que no tienen que impostar la voz, sino habar como saben, abriendo la boca para que se entienda.
Lo importante es lo que digan porque ustedes van a influir en los otros. Cuando hagan radio, escriban en un blog, se expresen, que es lo importante. Todos tenemos algo para decir. Con lo que hacemos, la camiseta que nos ponemos, siempre tenemos cosas para expresar, hay que usar los espacios que tenemos.
Los medios a veces parecen muy poderosos, y la gente tiene una fascinación muy especial por los que salen en los medios. Y ahora tenés mucha devolución de esa devoción, que es muy gratificante. Y si no te la creés, y pensás que con tu laburo podés colaborar y ayudar a alguien se abre una opción interesante.
Para crecer en la profesión, tener un poco de vuelo, yo les recomiendo leer. El tipo que lee da un paso adelante. Leer mucho te ayuda a saber cómo estructurar un discurso en la radio también.
Los medios en general y la radio en particular son un trabajo de grupo, donde una ayuda al otro, donde el operador ayuda al tipo que está haciendo aire, y él se apoya en el que hace producción y así todos a la vez.
Lo que les quiero decir es que aprovechen, porque acá tienen un estudio de radio bárbaro pero diviértanse, pásenla bien haciendo radio. La vida de eso se trata, de tratar de hacer las cosas que a uno le gustan y pasarla bien sin joder al otro; pero pensando que si el otro tiene un problema, uno le puede dar una mano.
– ¿Por qué te dedicaste al periodismo?
Cuando tenía 13 años iba a una escuela de Flores y una profesora de inglés pidió que pusiéramos una profesión y yo puse “journalist” y me quedó, sin saber muy bien por qué. Y después estudié Comunicación, que es una carrera muy amplia, donde se aprenden muchas cosas. Y después conocí la radio y me encantó. Que puedas hablar y no te vean la jeta es maravilloso.
– ¿Dónde trabajas ahora?
En realidad, tengo tres laburos. En Radio Nacional, con Mario Wainfeld, todos los días a la tarde, estoy en la Facultad dando clases de radio y otros trabajos de prensa.
-¿Cuándo caducás?
Está buenísima la pregunta. Esa medida la tiene cada uno. Yo creo que ya estoy caducando, porque me joden mucho algunas cosas.
– ¿Podés vivir de la radio?
Sí, yo vivo de esto. No estoy salvado, pero estoy bien. Fui haciendo mi recorrido, de a poco, empecé cortando cables, escribiendo los informativos del fin de semana, después fui haciendo producciones de a poco, hice coberturas y tardé muchos años hasta que logré ir pasando a otros espacios.
– ¿Cómo se entra a la radio?
Es difícil, no sirve armar currículum, o acercar tu trabajo. Hay que ser creativo, ir haciendo experiencia en las radios locales, escribir. Hay que empezar en las radios chicas, para ir haciéndose. Si vos hacés un programa en el barrio y lo dirigís a gente del barrio, a la que conocés, eso tiene llegada.
– ¿Qué le recomendarías a los chicos que todavía no saben muy bien qué es el periodismo?
Que lean de todo. Revistas, historietas también es leer. Que duden. Que miren y busquen gente que les gusta lo que hace. Y que traten de ver que no hay que agredirse y hay que mantener los intereses, la identidad, defender lo que les guste. Y que prueben, que se escuchen.
-¿Hace falta ir a la Universidad y estudiar para entrar a la radio?
Estudiar en la universidad te abre la cabeza, aunque tarde muchos más. Yo tardé 10 años para hacer la carrera, porque laburaba mucho. Pero estar te ayuda, porque conocés gente que te puede ayudar.
-¿Cómo es la rutina de un programa de radio?
¡Nunca se termina! Siempre están leyendo, los diarios, libros. También hablas con la gente, las fuentes, incorporar las dos campanas. Después vas armando lo que vas a decir.
Los productores van armando un esquema por escrito de lo que se va a decir.
– ¿Cómo hacen para chequear la información antes de decirla en la radio?
Uh!, eso es importante. En Radio Nacional hay un lema que es “la noticia antes de la primicia”. La ética del periodista tiene que ver con dejar claro y diferenciado qué es la noticia y qué es opinión. Hay que ser responsable porque uno influye en la gente, y porque la puede afectar a las personas que están escuchando.
– ¿A quiénes considerás buenos periodistas en la radio?
De los más nuevitos, Matías Martin. Es un tipo al que le sale bien, se planta frente al micrófono y funciona. Hay otros que son de madera, y hacen lo que pueden, él es bueno.
De los más “viejitos”, Héctor Larrea. Lo conozco, laburé con él, lo veo todos los días hacer radio. Es un tipo maravilloso, mejor que todos lo que conocemos. Una vez se vino con un megáfono y salió al aire así. Como logra sacarle más recursos a lo que parece que ya está inventado. Son tipos que saben lo que es la radio, y manejan lo que pasa, manejan la mesa, aunque no es nada fácil. Fernando Peña también era un fenómeno. Y Capusotto, también es un capo. Alejandro Dolina también es un personaje de la radio.
-¿Trabajaste en algún medio en el que tuviste que callarte?
Sí, en Radio Nacional hace años. Yo era crítico del gobierno, y la directora de la radio me bancaba, pero cuando ella se fue y vino otro me mandaron a hacer informes de un tema al que nadie le interesaba.
-¿La objetividad existe en el periodismo?
No, la noticia se va construyendo cuando se la cuenta, las cosas cambian a veces, y adquieren otras características. Cuando vos hablás y aclarás desde dónde, el oyente valora la sinceridad, que aunque no pienses lo mismo, podés decir lo que pensás.
-¿Qué otro trabajo te gustaría hacer?
Conducir un programa, tal vez un programa de boxeo, porque me gusta mucho.
